Una vez, en un momento dado, triste y decepcionado, escribí este intento de poema. Hoy ya bajo tratamiento médico, comprendo que como poema era muy malo, pero lo ratifico en todas sus partes.
¡Ay Caracas la insufrible!
Te llevamos muy adentro
Como de un cáncer el dolor
Como de la peste el olor
¡Ay Caracas la insufrible!
Te llevamos muy adentro
Como una costra
Como un chancro
¡Ay Caracas de las marchas!
¡Que confusión hay en tus gentes!
Te llevamos muy adentro
Como una bala caliente
¡Caracas que vergüenza!
Después de darte mi vida
La arrastras envilecida
Caracas me quiero ir
De donde aprendí a vivir
